sábado, 7 de marzo de 2009

Hipoteca II

Bueno, pues eso, que ya hay hipoteca y ahora nada más que quedan las obras, amueblar ... poca cosa. En primer lugar, a pesar de que teníamos un acuerdo con el vendedor para conseguir la hipoteca antes de noviembre, mientras que no se firmara no se iban a poder hacer las obras pertinentes y por otro lado, de octubre para acá, las hipotecas están cada vez más caras de conseguir y no precisamente porque el euribor esté muy alto.

Está claro que los bancos (excepto quizás el mío anterior) quieren buenos clientes y para asegurarse lo que hacen es subir al máximo las condiciones necesarias para dártelo, intentando garantizar de esta forma que las hipotecas que dan, no van a tener problemas para pagarse. En este sentido, ahora mismo parece haber sido una buena idea el haber solicitado la hipoteca ahora. Otra cosa será lo que depare el destino que sobre eso evidentemente no se tiene control.

Aunque, por supuesto, los bancos son bancos y las personas personas y al final también ha acabado pasando lo que en tantas otras firmas de hipotecas con cosas de las que te enteras a última hora. En particular, supuestamente habían hecho los cálculos con unos gastos superiores a los teóricos, pero cuando fui a hablar con el banco y me enseñaron la simulación rápidamente detecté (se veía sólo con multiplicar) que había un error. Afortunadamente las cuentas salían a pesar de todo y no hizo falta volver a mandar a analizar toda la operación.

Total que se firma, que si los seguros de vida y hogar, unas comisiones por aquí, unos gastos inesperados con otra gestoría por allá ... en fin que menos mal que me curé en salud porque si no lo mismo acabo con números rojos y todo por culpa de no hacer bien unas cuentas o no informar adecuadamente. Además que son ganas de quedar mal ya que eran gastos que había que abonar sí o sí, no me voy a cambiar de entidad por ese gasto en concreto. Creo que también puede entrar un cierto componente de inexperiencia por parte de esta sucursal en concreto que es bastante nueva. Pero bueno, esperemos que todo quede ahí y que solo reste pagar que no es poco.

Tras la firma, nos fuimos a comer a un restaurante asturiano donde mal del todo no se come, la verdad sea dicha y tras el refrigerio a dar vueltas por ahí a sitios donde sólo puedes ir con dinero a comprar o sin dinero a mirar. No compramos nada :-). Y aquí llega el motivo por el que comentaba en la entrada anterior que al final mejor de lo previsto.

Con el fin de analizar realmente qué cosas habría que hacer y qué cosas no, quería acercarme a la casa e ir tomando notas, viendo posibilidades etc. Al final lo hicimos y aparte de que creo que la solución para el dormitorio de matrimonio es bastante buena, lo mejor de todo es que me pareció todo mucho más grande. O quizás no mucho pero al menos sí más grande que las veces anteriores. Curioso efecto psicológico donde los haya. Me recuerda de hecho a cuando de niño me recetaron unas gotas bebibles para la visión (no sé exactamente por qué porque hoy en día sigo sin llevar gafas) y tras tomármelas, levanté la cabeza, imagino que enfoqué y de repente ya vi todo más nítido y mejor :-).

Bueno, voy a comer que luego habrá que volver a la casa a seguir planificando y puede que incluso a podar el jazmín.

Un saludo, Domingo.

3 comentarios:

La bailarina descalza dijo...

Me alegro que te enfrentes a una nueva casa y más aún, a una nueva hipoteca que ya están por la nubes. Suerte,
saludos,

Amada_Tierra dijo...

Te mandé un email para algo urgente, pero igual ha ido a parar a correo no deseado. :-s Porfa, ponte en contacto conmigo o con M.

Besos

Domingo dijo...

Para la bailarina: muchas gracias. Como a todos los hipotecados, sólo nos queda pedir trabajo y salud. Tú particularmente sabes lo necesario que es esto último. Espero que te encuentres mejor.

Para la de los mensajes no deseados ... anda que ya te vale. ¿No querías discreción? pues toma dos tazas :-P. En fin, a ver en qué se sustancia todo esto :-O.

Un saludo, Domingo.